Axel Kicillof le envió una carta a Javier Milei con críticas a su gestión, pero lo convocó a reunirse para articular políticas públicas

El mandatario bonaerense se refirió al descarte de cuatro mandatarios peronistas en la última reunión del Presidente de la Nación.

El gobernador bonaerense Axel Kicillof publicó en sus redes sociales una crítica al presidente Javier Milei luego de que lo excluyera de la reunión con otros mandatarios provinciales. Fue así que lo instó a que observe “la realidad” de los efectos de su política en la mayoría de la población, pero volvió a convocarlo a reunirse con él para articular políticas públicas. “Le pido que escuche, que corrija, que dialogue. No con los mercados. Con la gente”, escribió y se ofreció a reunirse para “articular políticas públicas”.
El giro dialoguista propuesto por el gobierno de Javier Milei no incluyó, al menos en la primera semana después de las elecciones, a la principal fuerza opositora. Es que para la cumbre de gobernadores citados en Casa Rosada el pasado jueves fueron convocados 20 mandatarios: los restante cuatro fueron los peronistas Gildo Insfrán (Formosa), Ricardo Quintela (La Rioja), Gustavo Melella (Tierra del Fuego) y Axel Kicillof (Buenos Aires).
Eso impulsó al mandatario bonaerense a escribirle una carta pública al Presidente, en donde le propuso que “si realmente desea abrir un diálogo con quienes piensan distinto y priorizan los intereses de todos los argentinos […] no es buena señal excluir a los gobernadores que considera ‘enemigos’. Las provincias que usted decidió no convocar representan a más del 40% de la población argentina”. “La exclusión de nuestras provincias es un gesto antidemocrático y contrario al espíritu federal”, consideró.
Así fue que el dirigente peronista realizó su balance electoral y relativizó el triunfo libertario: “La suma de quienes no votaron por su fuerza política y los millones de argentinos que no fueron a votar –seguramente desalentados luego de sucesivas frustraciones económicas y decepciones políticas– constituyen una mayoría social que no lo está aplaudiendo precisamente”.
En ese marco, Kicillof analizó que “el ajuste fiscal al que usted llama ‘superávit’ se construyó en gran medida sobre la quita ilegal de fondos a las provincias”. Utilizando como ejemplo al territorio bonaerense, enumeró: “En seguridad, sufrimos recortes arbitrarios; en transporte, la quita de subsidios afecta a millones de bonaerenses; en infraestructura, se paralizaron obras esenciales. A eso se suma la caída de la recaudación producto de la recesión y el aumento de la demanda social”.
El análisis económico de Axel Kicillof
En el inicio de la carta, el gobernador bonaerense entendió que pese al triunfo electoral libertario “las calamidades que su modelo económico provoca en nuestra sociedad siguen su curso”. “En esta nueva etapa de su gobierno, usted modificó su tono y su estilo, pero aún le falta lo más importante: enfrentar la realidad. Su plan económico, basado en mantener un dólar bajo y una recesión prolongada para contener los precios, fracasó. Los dólares de Scott Bessent pueden haber sido eficaces para calmar a los mercados financieros, pero de ninguna manera resuelven los problemas de la vida cotidiana de la mayoría de los argentinos”.
Luego, apuntó que en la actual coyuntura “las familias están endeudadas, los comercios vacíos, la industria paralizada, los salarios pulverizados. Los municipios y las provincias sostienen con esfuerzo lo que el Estado nacional abandona . Su política económica está destruyendo el tejido social y productivo de la Argentina. Por eso le pido que escuche, que corrija, que dialogue. No con los mercados, sino con la gente”.
Finalmente, Axel Kicillof opinó sobre las prometidas reformas laboral y fiscal, próximos objetivos del Gobierno. “Las reformas prometidas no contienen soluciones para una economía paralizada, para una industria nacional quebrada ni para un pueblo que la está pasando mal“, interpretó y aseguró que Casa Rosada “se equivoca si cree que, por participar de fotos o reuniones, el peronismo va a acompañar reformas que quiten derechos, destruyan la producción y ahoguen aún más a una sociedad golpeada, endeudada y sin horizonte de progreso”.



